Cuando pensamos en elegir una nueva manicura, lo primero que se nos viene a la cabeza suelen ser los colores, las tonalidades, las texturas o los diseños de nail-art; pero si buscamos un nuevo look, también podemos fijarnos en la forma de las uñas.
De hecho, hay que tener presente que su línea también influye en la apariencia final de nuestras manos, consiguiendo un aspecto más atractivo –o el efecto contrario–. Como nos explica Amaya Domínguez, directora técnica de Nails Factory: «Todo se complementa, el color y la línea de las uñas pueden estilizar la forma de nuestros dedos y manos; la clave está en saber cuáles son las combinaciones más adecuadas a cada perfil, ya que no todo vale».
Y es que cada mano tiene una forma de uña idóneo, por lo que en ocasiones es preferible evitar ese diseño de manicura que acabamos de ver en una revista y optar por una línea de uña que se adapte mejor a nuestra imagen. Y aunque efectivamente existen bastantes alternativas donde elegir, sí que podemos diferenciar seis perfiles básicos, que nuestra experta detalla a continuación: redondeado, cuadrado, ovalado, almendrado, stiletto y bailarina.
Es el estilo más sencillo, pero resulta la mejor alternativa cuando queremos conseguir el efecto visual de tener unas manos más esbeltas a la vez que llevamos las uñas cortas, más fáciles de mantener y cómodas para cualquier tarea. También se emplea para que el lecho de la uña tenga un aspecto más delgado y alargado.
Otra ventaja es que combina a la perfección con cualquier color y decoración.
Al igual que con las uñas redondeadas, con la forma cuadrada lograremos un look con carácter manteniendo las uñas cortas; y también resultan las más cómodas y resistentes para trabajar gracias a sus bordes rectos. Es la línea más adecuada para las manos finas o con dedos largos, ya que les dan un aspecto con más volumen.
Los colores sólidos con mucho brillo lucirán fenomenal con esta forma de uñas.
Aunque le queda bien a casi todo el mundo, esta silueta con la punta en semicírculo es una buena opción si tenemos los dedos cortos y anchos, ya que consigue darle un aspecto más grácil a nuestras manos. No en vano es el estilo que más se emplea en las pasarelas de moda. Con una apariencia muy femenina, necesitaremos que el borde de la uña se extienda unos cuantos milímetros por encima del dedo para obtener el efecto deseado.
Con las uñas ovaladas, cualquier diseño de nail-art quedará estupendamente, al igual que los tonos pastel.
De manera similar a la ovalada, las uñas con forma almendrada estilizan las manos y los dedos, por lo que es una alternativa idónea si tenemos las manos pequeñas o gruesas. Pero además, gracias a una base amplia que se reduce hasta una punta redondeada, mejoran el aspecto de las uñas estrechas. En general, aportan un look moderno y bastante natural.
Este popular estilo combina muy bien con colores neutros y tonos nude, o bien con atrevidos detalles metálicos.
Esta forma alargada y con una punta afilada siempre consigue llamar la atención, además de hacer que nuestras manos parezcan más largas. Se trata de un estilo atrevido pero bastante poco práctico, y necesita unas uñas largas y fuertes; de lo contrario, habrá que optar por los acrílicos.
La creatividad de los diseños de nail-art es perfecta para integrarla con esta línea para las uñas.
Esta forma recibe su nombre por su similitud con la de unas zapatillas de ballet, con un corte plano justo en la punta, dándole un perfil cuadrado. Al igual que con el estilo stiletto, hace falta tener unas uñas muy largas y fuertes, o acudir al acrílico, para poder lucir esta sofisticada opción.
Las tonalidades neutras son las que mejor acompañan a esta forma, que también resaltará con un acabado mate. Disfruta este acabado mate con nuestro nuevo Geils Premium,
Si aún no sabes qué opción elegir, nuestras técnicas te asesorarán en función de tus gustos para lograr es aspecto que buscas. Encuentra tu espacio Nails Factory más cercano en nuestra web.